Tú.

jueves, 23 de agosto de 2012

           Para mí, es muy importante tener siempre una persona capaz de "entenderte", ayudarte, apoyarte, o simplemente, estar ahí dándote ese cariño que te hace sentir la persona más afortunada del mundo. En esos momentos de debilidad, tristeza, o tal vez se trate de un momento que quieras compartir porque estás orgullosa de algo que te ha pasado o quizás, en el día a día, esa persona incondicional, está ahí, ofreciéndote todo su amor y más.
           Existen momentos en los que te sientes que estás harta de todo, que quieres desconectar, o cambiar de vida, tener algo que te haga más feliz, algún cambio notable por muy simple que sea... Pero, siempre se necesita el cariño, la estabilidad que te oferta la otra persona, sí, esa de la que tanto hablamos, esa que cada vez quieres más...
         Puedes hacerte millones y millones de preguntas a las que nunca encuentras respuestas, o bien, tardas en obtenerlas, y algunas, puede que sean confusas. Puede que no entiendas lo que escribo, tampoco lo pretendo. Puede que no vaya dirigida a ti esta carta. Puede que no vaya dirigida a nadie. Cada cual es libre de sacar sus conclusiones al ver una película, leer un libro, ver unas fotos, escuchar una canción, oír un ruido... Todos podemos pensar lo que queramos. Solo existe una realidad válida, la realidad individual, la tuya, la mía, y / o la de los demás. ¿Qué más da?
             Esta carta no trata de nada en concreto, pero cuenta sobre todo, cómo son las cosas abstractas.
Sentimientos... ¿Qué es un sentimiento? Hay muchos sentimientos: amor, tristeza, dolor, alegría, odio, rencor, miedo, ilusión, vergüenza... Algunos de ellos, se encuentran relacionados entre sí.
               Tener pareja sentimental puede parecer fácil, pero, ¿¡sabes que no lo es!? Conlleva muchas cosas. Cambia tu vida, tienes que acostumbrarte a ciertas personas, como su familia, a su modo de vivir, a sus gustos, sus deseos, sus comidas. ¿Das lo que pides? ¿Intentas dar lo que te gustaría recibir? Te ves obligada a muchas cosas que no deseas por el bienestar de tu pareja, y en ocasiones, de los dos.
              Todo lo que haces, es porque quieres, nadie te obliga. TÚ eres la dueña de tu vida, puedes construirla, moldearla, hacerla, vivirla como tú desees. Sólo tú eres capaz de decidir tu sueño.
              Un consejo: Aprovecha todo al máximo, sé feliz.

1 comentarios:

Coraima dijo...

Parece que estuviera viéndote escribir, acomodándote el pelo y mordiéndote el labio porque tus pensamientos van mucho más rápidos que tus dedos y se te agolpan las palabras al mismo ritmo que va mi pulso cuando me respiras sobre la boca, cuando son esos mismos dedos los que me rozan y multiplican mis latidos. Los que entrecortan mi respiración y quebran mi voz cuando están dentro de mi. Antes y después de hacerme tuya, mientras te prefieres mía.
Provocando que mis piernas tiemblen y mi piel pida más de tu sexo.
Te quiero hasta Júpiter, bordearlo y volver.

Publicar un comentario